LABORATORIO
DE INVESTIGACIÓN – CREACIÓN CALDAS
ACCIONES
DE ENCUENTRO
2011
SEGUNDO
SEMINARIO – TALLER
26,
27 y 28 de noviembre de 2011
El
proceso y el oficio
Encuentro
con Patricia
Triana y William Vásquez
Presentación
Se
espera trabajar en torno al artista a su proceso y a su materia a
partir de lo que se ha adelantado ya sobre la obra. Se invita a los
participantes a poner en común sus materiales habituales de trabajo.
Aquello que consideran su materia plástica y con lo que configuran
su obra. Este trabajo supone disponer los materiales, nombrarlos,
reconocerlos y por supuesto reflexionar sobre ellos.
Cada
artista tiene una experticia que ha desarrollado a partir de
manipular sus materiales, técnicas, ideas y reflexiones. Preguntarse
por el oficio como un elemento importante en el proceso creativo,
resulta aquí otro aspecto del laboratorio.
El
taller
del artista es el lugar, el modo de pensamiento, el espacio de la
experiencia en donde se construye la posibilidad de que la obra
acontezca. En realidad, es el lugar en donde, a través de una
actividad sistemática y crítica, se validan unas preguntas y una
forma de indagar en ellas que el artista, desde su propia
experiencia, ha elegido como significativas.
Objetivos
- Iniciar
una búsqueda que haga posible la revelación del quien, el artista
que está detrás de la obra.
- Propiciar
el espacio para la revelación de lo que cada artista considera su
materia plástica.
- Trabajar
colectivamente en el dialogo entre artistas en torno a los temas
propuestos.
Metodología
Trabajo
a partir del diálogo, ejercicios colectivos e individuales, registro
de las actividades, evaluación colectiva y permanente.
Actividades
- Introducción. Presentación del segundo encuentro empalme con el primero. Formas de abordar la pregunta por el artista y sus materiales.
- La mirada. El reconocimiento y la revelación del artista requieren una mirada crítica particular que se construya a partir de las imágenes que ya se tienen y las que aún están por construir.
- Labor. La diferencia entre trabajo y labor. El proceso, el oficio y la permanencia como elementos fundamentales de la práctica artística.
- Puente. Pasar de la obra al artista y de la obra a su esencia: la materia plástica de cada quien. Pasar de un lugar a otro, de un momento a otro, tender puentes.
- Escaparate. Cada quien tiene su escaparate, ¿qué hay en él? Como se disponen las materias y los objetos que están allí.
- Cruz. Las relaciones entre las materias y la forma en que se trabajan. Cruces metodológicos, prácticas, formas de restablecer enlaces que se encuentran rotos y que naturalmente estarían en conexión.
- Territorio. El artista se inscribe en un territorio en el cual también se inscriben sus materias y sus procesos, parte de reconocer y revelar al quien, revelar el territorio.
RELATORÍA
Sábado
4:30 p.m.
Se
da inicio al Segundo Seminario – Taller del Laboratorio. Se
presentan los talleristas Patricia Triana y William Vásquez. Se
propone una reflexión sobre la percepción del trabajo propio de
cada artista a partir de una mirada crítica particular. Se plantea
el ejercicio utilizando una imagen en la cual los principales
elementos son aquellos elementos que el artista considera sus
materias plásticas.
Durante
las primeras dos horas de trabajo se hace una presentación del
concepto de imagen dialéctica derivado del pensamiento de Walter
Benjamin a partir de las fotografías de dos fotógrafos de finales
de siglo XIX y comienzos del XX: Eugene Atget(Frances) y Alexander
Rotchenko (Ruso).
Durante
esta presentación se hace énfasis en la mirada crítica según la
cual es posible ver una realidad habitual a la cuál estamos
acostumbrados simultáneamente con una que no habíamos pensado o que
se hace con un sesgo particular, que está por ser pensada. Ambas de
manera superpuesta permiten la aparición de una tercera en la cual
es posible descubrir aspectos que se revelan a nuestros ojos y nos
permiten enriquecer aquella lectura inicial.
Los
artistas mencionados hacen este trabajo evidenciando ciertos aspectos
del cambio que surge alrededor suyo, en el territorio del cual hacen
parte, en un mundo que empieza a percibirse a partir de sus imágenes
como moderno.
En
el caso del trabajo de los participantes se espera construir a lo
largo de los tres días de trabajo esta relación de imágenes en las
cuales el diálogo y la interacción de todos permitirá ahondar en
ese carácter crítico de la reflexión.
Para
terminar la jornada se revisa el ejercicio de planteamiento inicial
de la imagen habitual que cada uno tiene de si mismo y se hace un
trabajo de puesta en común.
Domingo
9:00 a.m.
Durante
la mañana se continúa con el ejercicio de construcción de la
imagen crítica del trabajo de cada quien haciendo énfasis en la
importancia de que el proceso sea la parte más importante de la
reflexión y no únicamente la obra como producto final.
Cada
participante presentó su imagen y se les pidió una breve reflexión
sobre lo que sucedió de un día para otro en ese proceso de
construcción de la imagen. Se realizó un registro fotográfico con
el cual se buscaba revisar el proceso del ejercicio. Este ejercicio
de registro lo hicieron los talleristas y fue su mirada la que
insertó el sesgo en la manera de ver inicial, haciendo énfasis en
aspectos muy concretos de lo que aparece en las imágenes tales como
la presencia del color, las texturas, los materiales, las
herramientas etc. Los participantes hacen énfasis en los contenidos
de aquello que buscan representar con sus imágenes o de lo que
consideran sus búsquedas personales.
Antes
de terminar la jornada se hace una última reflexión sobre la
importancia sobre eso que constituye no sólo la obra sino
fundamentalmente el proceso. Así mismo se hace énfasis en la
necesidad de abandona momentáneamente el lugar desde el cuál se
encuentra uno normalmente situado. Descolocarse para ver otros
ángulos del asunto que nos ocupa.
Domingo
2.00 p.m.
En
la segunda jornada del día se plantea a los participantes continuar
y profundizar el ejercicio de la mirada al proceso de trabajo,
utilizando como pretexto algunas imágenes - conceptos que permitan
pensar en detalle ciertos aspectos de la práctica individual:
La
labor: Un concepto que se deriva del planteamiento de Hanah Arendt,
según el cual la vida activa del hombre puede ser pensada desde tres
facetas diferentes: labor, trabajo y acción. Se hace énfasis en la
labor con una forma de acción no encaminada a producir aparentemente
cosas de utilidad práctica. Sino que tiene que ver con el permanecer
haciendo algo que cuida lo fundamental: la vida.
En
el caso del artista la labor se refiere a aquello que tiene que ver
con el oficio y la exeperticia de la cual cada quien puede dar
cuenta. Así mismo de aquellos asuntos en los que el artista
permanece y se vuelven centro de su investigación.
El
Puente: Se piensa como la posibilidad de reconocimiento de una
dificultad, molestia o inquietud inicial que lleva al artista a
buscar establecer una estrategia que le permita comprender algo de
esa dificultad y establecer lazos con eso que está en lado opuesto
de la dificultad que podría entenderse como el conocimiento o la
comprensión. El puente no necesariamente resuelve el problema sino
que mantiene la tensión pero permite que existan cruces de ida y
vuelta.
Cruz:
La imagen de la cruz da que pensar a cerca de aquellos nodos en los
cuales se cruzan las tensiones importantes. Tiene que ver con
aspectos que aparentemente son incompatibles entre sí, pero que no
pueden evadirse porque hacen parte de todos los diferentes aspectos
que interesan a la cotidianidad y el pensamiento del artista.
La
idea de la cruz se refiere igualmente al reconocimiento de las
fracturas identificables de aquello que está roto y debería
restablecerse. La cruz implica una tarea, una relación que
construir, un trabajo por desarrollar. Este trabajo implica reparar
en la fractura para reparar aquello que está fracturado.
Territorio:
Pensar esta imagen supone reconocer los lugares (ya sean físicos
mentales o imaginados) de los que cada quién puede dar razón.
Establecemos una red de relaciones entre lugares que determinan y son
parte de las prácticas artísticas en las que participamos. Nombrar
esos lugares, hacerlos conscientes es fundamental para pensar lo que
fundamenta y constituye el trabajo del artista.
Todos
estos conceptos se agrupan en “El escaparate”. Esta imagen se
refiere a la conciencia de una estructura conceptual establecida por
cada quien, en la que aparecen como en un archivo, en un museo o en
una biblioteca, todos los elementos de que dispone el artista a lo
largo de su proceso creativo y todos aquellos de los cuales está en
búsqueda permanente y constituyen su investigación. Pensar en todo
aquello que podemos considerar a la mano y que apropiamos a lo largo
del reconocimiento y la experiencia constituye aquello que podemos
considerar como instancia procesual. Es decir, como lugar donde
ocurre el proceso que eventualmente puede dar lugar a la obra.
El
ejercicio planteado, busca la construcción de este escaparate en una
imagen primero como mapa conceptual y luego de manera concreta
utilizando para ello materias, materiales y demás elementos que
forman parte del trabajo del artista.
En
la puesta en común, los comentarios sobre el ejercicio fueron:
Paula:
(ver fotografía). Su escaparate está organizado a partir de dos
ejes, el primero vertical, conecta la fantasía arriba, con la obra
abajo. Este eje, es manifestación de su preocupación por la fe en
uno mismo. El otro eje, horizontal, se refiere al tiempo, pasado,
presente y futuro. También lo que ha quedado y permanece como
memoria y lo que resulta deseable hacía adelante. Considera muy
importante la idea del reflejo. En cuanto a lo concreto, unas cosas
aparecen colgadas y otras sobre el piso, algunas son visibles y otras
no. La manera en como todas están instaladas, implican el estado en
que su proceso se encuentra actualmente.
Sebastián
Describe
el proceso de creación de su escaparate como una búsqueda que
identifica con el proceso en el que se encuentra actualmente. Destaca
lo que fue en principio la selección de algunas cosas casualmente y
el escoger aquello que viene siendo importante para él. Este proceso
resultó inicialmente tedioso en un principio, pero al ir encontrando
y asumiendo cada cosa que cree debe hacer parte de su estructura, se
da cuenta de cómo es importante hacer consciente cada uno de los
aspectos que constituyen su obra: la literatura que alimenta su
pensamiento, sus hábitos cotidianos (fumar), los medios
electrónicos, sus instrumentos de dibujo (sus lápices), etc.
Considera
que el puente tiene que ver con el tiempo, la tensión se da entre el
pasado y el futuro y lo que se puede llevar de un lugar a otro tiene
que ver con la memoria. Para el es muy importante el concepto de
labor en relación con el reconocimiento del color en su propia obra.